6 de marzo 2020 | 11:03 am
La petrolera estatal de Venezuela, PDVSA, ha intercambiado millones de barriles de crudo por camiones cisternas y maíz en virtud de un acuerdo con la firma mexicana Libre Abordo SA.
El intercambio de petróleo por alimentos se da en un esfuerzo por asegurar importaciones de alimentos en medio de las estrictas sanciones estadounidenses que han provocado una reducción de su cartera de clientes, según la compañía petrolera.
Libre Abordo, que no tiene experiencia previa en el sector petrolero, hasta ahora ha tomado 6.2 millones de barriles de crudo pesado venezolano para revenderlos en los mercados internacionales y tiene dos cargas más de petróleo y combustible programadas para este mes, según los cronogramas de exportaciones de PDVSA revisados por Reuters.
En este contexto, la firma busca avanzar con un contrato firmado el año pasado con el gobierno venezolano, que actualmente está “en pleno efecto”.
Libre Abordo dijo que firmó un contrato en 2019 para exportar camiones cisternas para agua, así como toneladas de maíz blanco a cambio de suministros de petróleo.
“No es violatorio de las restricciones”: Libre Abordo
La compañía dijo que había consultado a abogados sobre la transacción y estos les habían informado que consideraban que no había violación de las sanciones de Estados Unidos ya que no se contemplaban pagos en efectivo porque el petróleo sería recibido para compensar la ayuda alimentaria provista.
Libre Abordo declinó revelar el nombre de la firma legal que proporcionó la asesoría, aunque envió a Reuters una copia del análisis.
El contrato entre los propietarios mexicanos de Libre Abordo y el gobierno venezolano entró en vigencia en 2019 y no se usaron intermediarios para las negociaciones, dijo la compañía.
Estos no son contratos de compra-venta. No es violatorio de las restricciones, casi se considera un contrato de ayuda humanitaria,
indicó.
El Departamento del Tesoro estadounidense, PDVSA y el gobierno venezolano no respondieron de inmediato a solicitudes de comentarios.
La compañía prevé completar la entrega de 210,000 toneladas de maíz blanco y 1,000 camiones de agua en los próximos meses, mientras recibe petróleo a cambio.
El contrato no tiene una fecha límite, por lo que las partes pueden acordar nuevos intercambios, dijo Libre Abordo.
Los embarques de petróleo recibidos se revenden de inmediato y los compradores los toman en los puertos de PDVSA sin que Libre Abordo reciba información sobre su destino final o uso, dijo la compañía que se formó hace una década y cuyas actividades comerciales aumentaron repentinamente en 2019.
Varios proveedores de alimentos a Venezuela fueron sancionados por las autoridades mexicanas en 2018 bajo acusaciones de sobreprecio y mala calidad de los productos vendidos, razón por la cual fueron multadas y se les ordenó suspender las exportaciones a Venezuela.
Sin embargo, Libre Abordo aseguró que no está relacionado con estas empresas.
Trueque: Firma mexicana Libre Abordo intercambia alimentos por petróleo de Venezuela
Reuters
Comparte
6 de marzo 2020 | 11:03 am
La petrolera estatal de Venezuela, PDVSA, ha intercambiado millones de barriles de crudo por camiones cisternas y maíz en virtud de un acuerdo con la firma mexicana Libre Abordo SA.
El intercambio de petróleo por alimentos se da en un esfuerzo por asegurar importaciones de alimentos en medio de las estrictas sanciones estadounidenses que han provocado una reducción de su cartera de clientes, según la compañía petrolera.
Libre Abordo, que no tiene experiencia previa en el sector petrolero, hasta ahora ha tomado 6.2 millones de barriles de crudo pesado venezolano para revenderlos en los mercados internacionales y tiene dos cargas más de petróleo y combustible programadas para este mes, según los cronogramas de exportaciones de PDVSA revisados por Reuters.
En este contexto, la firma busca avanzar con un contrato firmado el año pasado con el gobierno venezolano, que actualmente está “en pleno efecto”.
Libre Abordo dijo que firmó un contrato en 2019 para exportar camiones cisternas para agua, así como toneladas de maíz blanco a cambio de suministros de petróleo.
“No es violatorio de las restricciones”: Libre Abordo
La compañía dijo que había consultado a abogados sobre la transacción y estos les habían informado que consideraban que no había violación de las sanciones de Estados Unidos ya que no se contemplaban pagos en efectivo porque el petróleo sería recibido para compensar la ayuda alimentaria provista.
Libre Abordo declinó revelar el nombre de la firma legal que proporcionó la asesoría, aunque envió a Reuters una copia del análisis.
El contrato entre los propietarios mexicanos de Libre Abordo y el gobierno venezolano entró en vigencia en 2019 y no se usaron intermediarios para las negociaciones, dijo la compañía.
indicó.
El Departamento del Tesoro estadounidense, PDVSA y el gobierno venezolano no respondieron de inmediato a solicitudes de comentarios.
La compañía prevé completar la entrega de 210,000 toneladas de maíz blanco y 1,000 camiones de agua en los próximos meses, mientras recibe petróleo a cambio.
El contrato no tiene una fecha límite, por lo que las partes pueden acordar nuevos intercambios, dijo Libre Abordo.
Los embarques de petróleo recibidos se revenden de inmediato y los compradores los toman en los puertos de PDVSA sin que Libre Abordo reciba información sobre su destino final o uso, dijo la compañía que se formó hace una década y cuyas actividades comerciales aumentaron repentinamente en 2019.
Varios proveedores de alimentos a Venezuela fueron sancionados por las autoridades mexicanas en 2018 bajo acusaciones de sobreprecio y mala calidad de los productos vendidos, razón por la cual fueron multadas y se les ordenó suspender las exportaciones a Venezuela.
Sin embargo, Libre Abordo aseguró que no está relacionado con estas empresas.
Comparte
Reuters
Comparte
China envía a tres astronautas a su estación espacial en misión Shenzhou-16
Elizabeth Holmes, fundadora de Theranos, lista para mudarse a su nuevo hogar: una prisión en Texas
Elon Musk realiza su primera visita a China en tres años; expansión de Tesla, en la mira