PIB de Estados Unidos supera las expectativas; crece 2.9% en el 4T del 2022

26 de enero 2023 | 9:31 am

Si bien el desempeño de la economía estadounidense en el último trimestre del 2022 fue menor al del periodo previo, la dinámica fue superior a las expectativas de los mercados.

De acuerdo con primera estimación de la Oficina de Análisis Económico del Departamento de Comercio de la Unión Americana, el Producto Interno Bruto (PIB) del país vecino del norte registró un crecimiento de 2.9% a tasa anualizada, con ajuste estacionario, en el cuarto trimestre del año pasado.

Puedes leer: Peso pierde fuerza ante dato optimista del PIB de Estados Unidos

Dicho aumento fue menor a la variación de 3.2% en el tercer trimestre, marcando una tendencia de desaceleración y producto de un efecto rebote por las caídas de 0.6% en el segundo trimestre y de 1.6% en los primeros tres meses del 2022, es decir, después de una fase recesiva.

Sin embargo, el incremento de 2.9% del PIB de Estados Unidos superó a las expectativas de los mercados, que esperaban un alza de 2.6%.

Temores de recesión se reducen

Para Janneth Quiroz Zamora, subdirectora de Análisis en Monex, el resultado del PIB de la Unión Americana reduce los temores de recesión.

Sigue el comportamiento de la mayoría de las monedas, que se deprecian frente al dólar, pues el buen reporte del PIB estadounidense incrementó las apuestas a favor de que la Reserva Federal siga incrementando su tasa de interés objetivo

dijo la especialista.

Aun así, Quiroz Zamora detalló que el peso mexicano podría mostrarse más defensivo que el resto, ya que una actividad económica vigorosa en Estados Unidos seguirá apoyando a las exportaciones mexicanas, el envío de remesas, turismo e inversión extranjera.

Las alzas

Según la Oficina de Análisis Económico, el aumento del PIB derivó de alzas en la inversión en inventarios privados, el consumo, el gasto de los gobiernos federal, estatal y local y la inversión fija no residencial.

Te puede interesar: Caída del IGAE aviva temores de recesión

Lo anterior compensó ​​en parte las disminuciones en la inversión fija residencial y las exportaciones. En tanto, las importaciones, que son una resta en el cálculo del PIB, disminuyeron.

Destaca que al incremento en la inversión en inventarios privados estuvo liderado por la industria manufacturera, principalmente productos derivados del petróleo y el carbón, así como por los productos químicos.

Mientras en el consumo resaltaron los ascensos en atención de la salud, vivienda, servicios públicos y vehículos de motor y sus repuestos.