10 de noviembre 2020 | 5:00 am
La conversión de los supermercados hacia un formato físico y digital cobró una relevancia digna de observar durante el confinamiento. Se aceleró la compra en línea de diferentes productos, sin embargo, hay ciertas categorías que presentan un reto para el consumidor mexicano, como la compra de frutas y verduras.
Esto lo detectó Alejandro Sisniega, cofundador y CCO del supermercado digital Jüsto.
“Hay mucha resistencia al consumo de frutas y verduras porque la gente está acostumbrada a ir a ver, tocar y definir la maduración”.
El esfuerzo por hacer es muy grande, dice, porque los supermercados siguen recibiendo gente una vez que se relajaron las medidas de confinamiento. “Sigue habiendo una gran cantidad de personas que van a los supermercados a hacer las compras”.
Pese a la presencia de la experiencia que ofrecen los supermercados tradicionales, Sisniega considera que es necesario cambiar la manera en que está funcionando el ecosistema, como la relación entre proveedores y autoservicios, así como las complejidades tanto operativas como de condiciones comerciales que tienen los pequeños empresarios para acceder a este canal de ventas.
Lo importante, agrega, es qué porcentaje regresará a hacer su despensa a las tiendas en físico versus cuánta gente se quedará a realizar el supermercado en línea.
Ahí es donde la competencia se pondrá interesante, porque el supermercado te ofrece una experiencia. Para mucha gente es el paseo dominical contra una experiencia personalizada, donde se puede hacer el ‘súper’ en 20 minutos y te llega todo a domicilio
Alejandro Sisniega, cofundador y CCO de Jüsto
La entrada de nuevos jugadores al segmento, según Sisniega, es de gran ayuda para transformar la industria de autoservicios más rápido.
Sisniega comentó en el marco de la octava edición del festival de emprendimiento INCmty 2020 que su trabajo será convencer a la gente que le gusta ir al supermercado que puede utilizar ese tiempo para otras actividades más divertidas.
Y el reto más importante: educar al consumidor para que consuma frutas y verduras en línea.
Se espera que los ingresos en el segmento de entrega de alimentos de plataforma a consumidor muestren una tasa de crecimiento anual de 10.6%, lo cual resulta en un volumen de mercado de 54,334 millones de dólares para 2023, de acuerdo con Statista.
Supermercado en línea: más retos
La pandemia estuvo lejos de impactar negativamente a las plataformas, sin embargo la demanda implicó retos.
En el caso de Jüsto, Sisniega comentó que el principal reto fue operativo. Durante las primeras semanas y un par de meses tuvieron crecimientos por arriba del 500%, de triple dígito, que sacudieron toda la operación.
“La parte operativa sí es complicada, es decir, tengo una capacidad de almacenaje de 40 toneladas de carne y mi consumo se está yendo a 400 toneladas, ¿qué vas a hacer?, no solo cómo te van a responder los proveedores, sino cómo vas a almacenar el producto, emplear la capacidad de recibir el producto”.
Además, escalar la tecnología puede llegar a ser más sencillo, aunque actualmente los pedidos ya se estabilizaron, comparado con las primeras semanas de la pandemia en México.
Jüsto considera que hay mucho que hacer en la parte de la tecnología, asunto al que se dedicará la empresa, además de continuar con la expansión de sus operaciones, que se vio frenada por la crisis sanitaria.
“Estamos en un momento donde debemos ser precavidos. La única expansión de este año fue la de Querétaro”.
El próximo año esperan expandirse no solo las principales ciudades de México, sino a otros países de la región de Latinoamérica.
Compra de frutas y verduras en línea, el verdadero reto de los supermercados
Marisol Morelos
marisol.morelos@elceo.com
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10 de noviembre 2020 | 5:00 am
La conversión de los supermercados hacia un formato físico y digital cobró una relevancia digna de observar durante el confinamiento. Se aceleró la compra en línea de diferentes productos, sin embargo, hay ciertas categorías que presentan un reto para el consumidor mexicano, como la compra de frutas y verduras.
Esto lo detectó Alejandro Sisniega, cofundador y CCO del supermercado digital Jüsto.
“Hay mucha resistencia al consumo de frutas y verduras porque la gente está acostumbrada a ir a ver, tocar y definir la maduración”.
El esfuerzo por hacer es muy grande, dice, porque los supermercados siguen recibiendo gente una vez que se relajaron las medidas de confinamiento. “Sigue habiendo una gran cantidad de personas que van a los supermercados a hacer las compras”.
Pese a la presencia de la experiencia que ofrecen los supermercados tradicionales, Sisniega considera que es necesario cambiar la manera en que está funcionando el ecosistema, como la relación entre proveedores y autoservicios, así como las complejidades tanto operativas como de condiciones comerciales que tienen los pequeños empresarios para acceder a este canal de ventas.
Lo importante, agrega, es qué porcentaje regresará a hacer su despensa a las tiendas en físico versus cuánta gente se quedará a realizar el supermercado en línea.
Alejandro Sisniega, cofundador y CCO de Jüsto
La entrada de nuevos jugadores al segmento, según Sisniega, es de gran ayuda para transformar la industria de autoservicios más rápido.
Sisniega comentó en el marco de la octava edición del festival de emprendimiento INCmty 2020 que su trabajo será convencer a la gente que le gusta ir al supermercado que puede utilizar ese tiempo para otras actividades más divertidas.
Y el reto más importante: educar al consumidor para que consuma frutas y verduras en línea.
Se espera que los ingresos en el segmento de entrega de alimentos de plataforma a consumidor muestren una tasa de crecimiento anual de 10.6%, lo cual resulta en un volumen de mercado de 54,334 millones de dólares para 2023, de acuerdo con Statista.
Supermercado en línea: más retos
La pandemia estuvo lejos de impactar negativamente a las plataformas, sin embargo la demanda implicó retos.
En el caso de Jüsto, Sisniega comentó que el principal reto fue operativo. Durante las primeras semanas y un par de meses tuvieron crecimientos por arriba del 500%, de triple dígito, que sacudieron toda la operación.
“La parte operativa sí es complicada, es decir, tengo una capacidad de almacenaje de 40 toneladas de carne y mi consumo se está yendo a 400 toneladas, ¿qué vas a hacer?, no solo cómo te van a responder los proveedores, sino cómo vas a almacenar el producto, emplear la capacidad de recibir el producto”.
Además, escalar la tecnología puede llegar a ser más sencillo, aunque actualmente los pedidos ya se estabilizaron, comparado con las primeras semanas de la pandemia en México.
Jüsto considera que hay mucho que hacer en la parte de la tecnología, asunto al que se dedicará la empresa, además de continuar con la expansión de sus operaciones, que se vio frenada por la crisis sanitaria.
“Estamos en un momento donde debemos ser precavidos. La única expansión de este año fue la de Querétaro”.
El próximo año esperan expandirse no solo las principales ciudades de México, sino a otros países de la región de Latinoamérica.
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Marisol Morelos
marisol.morelos@elceo.com
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